Año 2022

Entre los resultados principales, cabe destacar que el perfil de la mujer cazadora es el de mujeres que, mayoritariamente, se encuentran en una franja de edad inferior a 40 años, con estudios secundarios y superiores (una gran parte de ellas cursando estudios universitarios), amplia diversidad de perfiles profesionales e ingresos mensuales, en la unidad familiar, que oscilan entre 1.000 y 1.500 euros.

Por otra parte, las cazadoras hacen una alta valoración de la actividad cinegética como práctica recreativa, a la que dedican unos 50 días al año, inclinándose por modalidades y especies de caza mayor.

Motivaciones principales

Entre los motivos que las llevan a practicar la caza, cabe destacar cuatro aspectos esenciales:

1. La posibilidad de disfrutar de la naturaleza en términos de conservación
2. Salir con sus perros
3. Compartir el día con amigos
4. Disfrutar de la comida en el campo

Además, el estudio reveló que la gran mayoría de cazadores son favorables a transmitir su afición a hijos e hijas por igual, aunque, cuando las madres son cazadoras, se incrementa la probabilidad de que sus hijas también lo sean, convirtiéndose así en un importante transmisor de la actividad de generación en generación.

Importancia de los medios de comunicación

Así, a través de las distintas encuestas se detectó el importante papel que juegan los medios de comunicación y las redes sociales en la difusión de la incorporación de la mujer a la caza y cómo esta presencia está contribuyendo a su vez a mejorar la imagen de la caza de cara a la sociedad, así como a proyectar la contribución que, en materia ambiental, económica y cultural, tiene la actividad.

Finalmente, es destacable que la mayor parte de los encuestados, tanto hombres como mujeres, son optimistas en cuanto a la incorporación de la mujer al mundo de la caza, señalando que no existe discriminación de género dentro de la actividad.

Entrevistas personales con grupo de expertas

En paralelo con el proceso de encuestas, se realizaron entrevistas personales a un grupo de expertas con la finalidad de profundizar en varios aspectos, incluyendo retos y desafíos futuros de las cazadoras. En este grupo estuvieron representados diferentes perfiles de cazadoras, empresarias, investigadoras y guardas de caza.

De acuerdo con sus respuestas, uno de los principales retos que habría que abordar a corto plazo sería el de consolidar la tendencia, en lo que al aumento del número de cazadoras se refiere, al tiempo que habría que incrementar el número de cazadoras que ostentan cargos directivos y de responsabilidad en las distintas asociaciones, organizaciones y entidades relacionadas con el sector.

En este sentido, aunque la caza siga siendo una actividad practicad mayoritariamente por hombres, las personas entrevistadas coincidían en que la incorporación de la mujer a la caza será determinante para el futuro de la actividad, valorando que su presencia contribuirá a garantizar el relevo generacional.

Necesidad de seguir avanzando en la incorporación de la mujer al mundo de la caza

Por último, aunque la incorporación de la mujer al mundo de la caza es un hecho y sigue una tendencia ascendente, no se puede asegurar que esté consolidada. De acuerdo con las opiniones recabadas, parece claro que, en el futuro, será importante el papel que deben jugar los medios de comunicación y las redes sociales, junto con la programación de otro tipo de actividades (jornadas, seminarios, grupos de trabajo, ect.) para seguir avanzando en la incorporación de la mujer al mundo de la caza, tanto en el plano de la práctica cinegética, como en el de la incorporación al mundo de la gestión empresarial / profesional.